DEBERÍAS, DEBERÍAS (si no la viste, deberías verla) “Bailarina en la oscuridad” por Carla Graciani

Titulo Original: “Dancer in the dark”.

Director: Lars Von Trier.

Genero: Drama musical.

Guion: Lars Von Trier.

Reparto: Bjork, Catherine Deneuve, David Morse, Peter Stomare,entre otros.

Año y Origen: 2.000, Dinamarca, Suecia, Francia.

Duración: 140 minutos.

Después del letargo literario no puedo recomendarles una película, tengo que invitarlos a que despierten todas sus emociones con una obra de arte como lo es “Bailarina en la oscuridad”.

Bjork se entrega de cuerpo y alma para darle vida a Selma una madre soltera que arriba a EE. UU a principios de los 60’ padece una enfermedad degenerativa que progresivamente la va dejando ciega pero lo peor del caso es que es hereditaria, la idea de que Gere, su hijo, padezca lo mismo que ella la lleva a trabajar a destajo en una fabrica para solventar la operación que impedirá que su hijo sufra la misma suerte.

Selma es una mujer integra, ingenua, aficionada a las comedias musicales porque bajo su óptica “ahí no pasa nada malo” y encuentra un escape a la rutina, a los problemas, a las miserias, a través de su imaginación que la rescata de los momentos mas críticos sumergiéndose en distintos cuadros musicales, ella puede bailar con el monótono ruido de las maquinas, y el crujir de las vías cuando pasa el tren , se sumerge en este delirio porque la música la hace libre, llena su soledad y la rescata de su dura realidad; ella padece una ceguera física pero cual es mas grave? la de ella o la de la sociedad llena de avaricia , crueldad e indiferencia en la que estamos inmersos.

Bajo la excelente dirección de Lan Von Trier, Bjork demuestra que no solo posee una voz maravillosa es una gran actriz que se vale de su genuino encanto para contarnos esta conmovedora historia de amor, el mas puro, altruista y completo que existe, el de una madre.

***** Excelente!!!

TODO LO QUE NECESITAS ES DESAMOR por Natalia Graciani

Hay promotores de sentimientos por ahí, ser querido vende, vende chocolates, planes de telefonía móvil, preservativos, osos de peluche, antialérgicos, pruebas de embarazo, cunas, guarderías, préstamos bancarios, casas, heladeras, lavarropas, televisores, pañuelos descartables, helado, ansiolíticos, abogados, placas de cementerio. Hay una armería que quiere hacerte creer que debes estar acompañado, tener ochocientas cenas en pareja donde todos simulen ser felices y te traten de arrastrar al estado angustioso en el que viven porque simplemente la gente no tolera ver que estas en una anarquía luminosa te quieren con ellos, pagando cercas en cuotas, son la versión mas retorcida del tío Sam, con ligas y velos esperando un adherente más en la terrible institución de los pares, y quienes son los pares? Estas zapatillas, estos mocasines que nos llevan por caminos donde el adormecimiento y la espera de la muerte es la única solución, quienes son estos compradores compulsivos? De donde les nace esta fe generosa? Acaso le creyeron a Enrique iglesias cuando hablaba del amor como una experiencia religiosa? O este último hacía dicha declaración por un rencor a la humanidad por ser un pésimo letrista, porque su lunar le bloqueaba las ideas o porque en realidad el es un iluminado y la experiencia religiosa es de una religión en particular, es musulmana y todos nos exponemos para que nos vuelen en mil pedazos

Me dijeron una vez que debía ser emisora de amor continuamente y que en algún momento iba a llegar el receptor adecuado, recordé entonces que termine una relación previa diciéndole al muchacho en cuestión “estamos en diferentes sintonías” entonces me di cuenta, la tecnología esta metiendo la cola en nuestras vidas amorosas! El negocio se expande! será que siempre soy la que quiere más en las relaciones porque en realidad soy como un artefacto con mucha señal y poca recepción? después de ocultarme a mi misma tantas veces quien soy para caer en gracia a cualquier desgraciado, no seria lo más prudente huir de este circulo macabro y existir fuera del dictamen universal?

Galeano dijo que ojala podamos tener el coraje de estar solos y la valentía de arriesgarnos a estar juntos, porque de nada sirve un diente fuera de la boca, ni un dedo fuera de la mano pero aunque al maestro no se le contradiga nada, los tiempos de William Wallace han sido reemplazados por los anunciados orangutanes de Soledad Silveyra y por los engrasados mecánicos de Suar entonces quizás debamos tener el coraje de quedarnos sin señal, de volver a las raíces, arrojar los zapatos y empezar a ser felices estando descalzos.

GRULLAS JAPONESAS por Giselle Joandet

Ofrecí en una bolsa de terciopelo

mis primaveras por adelantado

las vacaciones en la nieve

música, carnavales.



Serví mi hígado en un plato

jugamos a cocinarlo con albahaca

y de postre, helado.

Los reyes esparcieron mis órganos por el parque

y brillaban.



Atrapamos pájaros azules gordos

juntamos semillas

pusimos todo en mi interior

para llenarme



Ahora los pájaros están tristes

no tienen luz ni agua

me tiro panza arriba al sol y

lloro



Cuando cantan se hamacan en las ramas

de un árbol ya crecido

que te recuerda

DESESPERANZA (PRÓXIMA ESTACIÓN) por Natalia Graciani

Todos mis rieles terminan en vos.
Estoy maldita por tus comisuras saladas.

Satélites travestis, enfundados en gasa.
Taxis a sueños inquietos de
óperas agonizantes y caramelos
de gelatina.

Homicidas me columpian,
La feroz soga desmenuza mi piel.
Tu sonrisa lúgubre irradia gozo,
es una delicia.
Te aviso nene: las llagas que creas
supuran magia.

Si devuelves los pasos
Vagones serán expatriados,
Giraran dolientes, parodiando mi actualidad.

Cuando tus rodillas besen con su
sangre estos caminos,
las regadas piedras me glorificaran.

INSOMNIO por Damian Lovagnini Nievas

El insomnio,
Insomnio, con telarañas y ataúdes,
Insomnio como caramelos amargos.

Sí, siempre caigo en sus telarañas.
Luego, todo es amores nuevos,
Colectivos sin terminal
cuya parada
es la cama triste
por la noche, ese oscuro ataúd.

Se dibuja una mueca,
mastico un amargo caramelo de pocos sueños,
escondido como una sombra,
pálido como una mañana de agosto.

Cuando vuelven los ojos cerrados,
las pesadillas habituales de mis primeros sueños,
no escribo, no pienso,
sólo soy un mundo surrealista atrapado en las almohadas.

Y más tarde, si mi instinto maquinal renace,
sueño con un nombre nuevo,
Algún delirio inoportuno me llena de entusiasmo,
Pero pierdo el tiempo, creo y me enamoro,
Y soy un niño en pijamas que por la noche, cuando todos duermen,
Busca los caramelos ácidos que le quitan el sueño,
Y se enreda en telarañas,
Y abre un negro ataúd,
Para verte desde la oscuridad,
Pálido como una mañana de agosto,
Para no soñar con tu nombre.

ORILLA ROTA por Pablo Pesco

Es que las cosas que tengo
ya no son santas
y bebo del sol un leopardo hambriento
voy a llamar, con un grito
o mandar un mensaje
tal vez conectarme
encharcar el ruido de mis ojos

Por ahí pinta otra
ser bebido por la noche
la virgen en remera esta en alguna disco
sexo fresco
sangre latente
la lluvia de astillas cae
quiebra el sueño

Pero hace frio
mejor me conecto en casa
no hay una puta cosa santa

ACERCA DE LA MUJER CON LAS PIERNAS DESNUDAS CRUZADAS EN EL PISO por Giselle Joandet

Omar y Luisa veían una película antigua en blanco y negro. Las mujeres jóvenes lucían el cabello muy corto, a Luisa le hubiera gustado llevarlo así, y pensaba en eso mientras Omar acomodaba los almohadones debajo de sus cabezas. Ella tenía los pies al descubierto y planeaba tapárselos, Omar comía helado de crema directamente del pote, cuando Luisa gritó.
El alarido traspasó la ventana del cuarto, erizó el pelaje de la gata y atormentó a las personas en la calle. A Omar se le volvió el cabello blanco en quince segundos y los vidrios de la casa se humedecieron.
Había una mujer con las piernas desnudas cruzadas en el piso. Las extendía hacia delante, con la pantorrilla izquierda sobre la pierna derecha, mirándose la punta de los pies. Los brazos le caían a los costados, presa de un cansancio extremo. Vestía camiseta blanca y ropa interior. Luisa relataba lo que tenía enfrente con los ojos desorbitados, repetía: -Ella salió del río, está chorreando-. Pero Omar sólo encontraba una mancha de humedad con forma de conejo, donde Luisa señalaba, y el resto era una pared vacía. Para él estaban solos en el cuarto. Luisa se tapó la cara con las manos y hamacó su cuerpo como en una mecedora.
De pronto se compuso y marchó en línea recta hasta la mancha del conejo. Allí se había formado un charco que se extendía por la alfombra, Omar se preguntó por dónde entraba el agua, porque era consciente de que no llovía. Luisa se puso en cuclillas y pasó la mano por una mejilla invisible. –No te tengo miedo, no, no, lo arreglaremos. Hay lugar. Ni siquiera va a notarlo-, dijo y miró a Omar de soslayo. Volvió a la cama caminando despacio y se acostó dándole la espalda.
A la mañana siguiente negó todo el acontecimiento, cuando Omar le enseñó la alfombra mojada, argumentó que habría una gotera y que dormidos no habían escuchado llover.

PAN, MANTECA Y AZÚCAR por Natalia Graciani

Te sueño entubada, cocinando tortas, entubada
Un títere, enlazado por venas de polvo
Embistieron nuestro nido, somos de vidrio,
nos han penado con grietas eternas.

Una nación de lucecitas infectada
Contaminando frazadas, besos,
Fiebres, retos, uñas de 5 años pintadas,
Maria elena walsh, zapatos de charol,
Pan, manteca y azúcar.

Le pregunto a mi hermana:
- En una caja de fósforos al pececito,
en el patio al perro,
en una planchuela de corcho a la mariposa,
en un ataúd a cualquier persona.
Decime Carla, donde descansa un hada?


Es de noche, vuelvo a soñarte, mojo tu cara,
la soplo, te alivia. Tocas mi frente,
me sanas, vivís, me alivio.
Llega el día, me poseen despertares mecánicos
Sigo caminando entre ellos,
sonriente, entubada.

por Damian Lovagnini Nievas

El mundo conspira contra el alma,
el rincón sin libros,
la vereda sin rayuela.
La piel es una jaula?
o una eficaz penitencia?

El mundo conspira contra el alma,
Eufonía de escepticismo,
Salomón cibernético.
Hablaremos sobre los pájaros
En el alfeizar de la ventana?

El mundo conspira contra el alma,
Mi máscara de hoy
Me llena de alegría,
Esa es la evidencia.

Acaso no somos nosotros?